La producción editorial cayó 25%
En el marco de la apertura de la 43° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, la Cámara Argentina del Libro (CAL) dio a conocer las cifras de la producción editorial nacional 2016. Todos los indicadores reflejan la crítica situación que vivió el sector del libro el año pasado y que continua en los primeros meses de 2017.
El primer síntoma negativo puede ser encontrado en la cantidad de novedades lanzadas al mercado, entendiendo por ellas a las obras que nunca antes habían sido publicadas y, por lo tanto, significan un mayor riesgo para la editorial ya que desconoce su resultado comercial. Mientras que en 2015 se habían publicado 29.220 novedades, en 2016 fueron apenas 27.710, casi 1.500 títulos menos, lo que equivale a un -5% menos. Esta cifra es la más baja de los últimos 14 años, exceptuando 2012. En términos porcentuales es la caída más abrupta desde el año 2002.
Otra cifra que preocupa es la producción de ejemplares. En este caso la caída es del -25,1% con relación al año 2015, lo que en cantidades netas significan casi 21 millones de libros menos producidos en el país durante 2016. Una cifra alarmante si se tiene en cuenta que en los últimos cinco años el promedio de ejemplares impresos era de más de 90 millones de libros.
En el mundo del libro no solo las casas editoras publican obras; también existen las auto-ediciones, las ediciones dependientes de instituciones educativas públicas, privadas y demás organismos oficiales. La Cámara Argentina del Libro analiza cada una de ellas por separado. Si nos centramos puntualmente en las publicaciones dependientes de empresas editoriales cuyo fin principal es la comercialización de libros la situación es igual de negativa. En este ámbito denominado SEC (Sector Editorial Comercial) la cantidad de novedades lanzadas en 2016 disminuyeron un -14% frente a 2015 y los ejemplares publicados cayeron -29% comparados al mismo año.
Otra cifra alarmante que puede desprenderse del informe de la CAL es la disminución de editoriales que se mantuvieron activas durante el año pasado. Mientras que en 2015 las editoriales que publicaron al menos un título fueron 341, en 2016 las razones sociales con actividad fueron 280; por lo tanto 61 casas editoras no publicaron un solo título en todo el año.
Una variable más a tener en cuenta es el Comercio Exterior del libro; este indicador históricamente dio negativo. Sin embargo, en los últimos cuatro años el Ministerio de Cultura Nacional había logrado disminuir el resultado negativo en dicha balanza, reduciendo las importaciones y manteniendo estables las exportaciones. El año 2016 marcó el fin de esta política ya que las importaciones de libros aumentaron un 95% y las exportaciones continuaron sin variaciones. De esta manera, el resultado negativo en el comercio exterior del libro durante 2016 arrojó un resultado negativo de 50,7 millones de dólares, una pérdida 387% mayor a la que arrojó la balanza en 2015 (13,1 millones de dólares).
Los cinco indicadores analizados en este artículo, en base a los datos brindados por la Cámara Argentina del Libro, muestran la crisis profunda que esta parte del campo de la cultura está viviendo en los últimos 18 meses.
Resumen:
a) Novedades publicadas: -5%
b) Ejemplares producidos: -25,1%
c) Ejemplares producidos por el SEC: -29%
d) Cantidad de editoriales activas: -18%
e) Balanza Comercial del libro: -50,7 millones de dólares